Amado Wayne:
En la quietud de la noche... el canto suave, ligero como el viento me adormece. Aquella voz que conozco... que recuerdo... que se desvanece.
Veo, miro... observo la quietud de la ciudad.
Todos en sus nidos, cálidos algunos... otros fríos por la ausencia; justo como el mío... porque no estás.
& me lleno escribiendo porque te extraño...
& extrañarte me parece que es lo único que puedo hacer esta noche, porque me invento mil formas en mi cabeza, de hacer el amor a la distancia...
& no sentir que estás tan lejos, inmerso en documentos, con millones de palabras que apenas entiendo... porque trato de mezclarme en ese mundo que te pertenece... a ti & a tu gran inteligencia...
Me observo a la distancia... En esta calle oscura... El foco se ha apagado. Miro a mi alrededor, la humedad de mi jardín... es como la humedad de mis ojos sin explicación.
Me pregunto... ¿Es porque estás lejos? de pronto, lo noto: estoy así porque me paseo por los techos de la 30 calle por la avenida Bolívar, como una Banshee, sin descanso... buscando los recuerdos de cuando íbamos juntos desde tu morada, ¡ese sagrado templo que me has compartido en tu habitación! & hacemos silencio... pero en el interior, estamos riendo como un par de niños traviesos... porque no es travesura ni maldad, sólo una pizca de picardía añadida al amor que nos invade.
Me doy cuenta, que lo que me frena es el miedo que siento de perderte... Lo que me frena es el sentimiento que voy a perderte, que voy a verte partir... & que no limpiarás más mis mejillas, o no iluminarás más mi sonrisa... Porque eres el único al que le sonrio de esa forma...
Siento caminar por esas calles desiertas, como si fuera esposa del tiempo; sin nada que perder... camino buscando & atrapando recuerdos hermosos. Los necesito para sobrevivir, son lo único que tengo para seguir andando... & llevando aquello que escogí por error. & caminas conmigo... yo camino contigo. En un valle solitario.
Tu silencio acompaña al mío... & el camino es largo. Nuestras miradas se cruzan, se entrecruzan, se acompañan, se acarician... se besan. & del beso después ya no se distingue cuál es cada una. Son una melodía perfectamente imperfecta, donde mis defectos se encajan con tus virtudes... & me haces sentir como si pudiera cambiar & ser más de lo que soy, una maraña de defectos. & soy tan enmarañada como mi cabello rebelde... Lo bueno es que es poco... & puedes peinarlo a tu antojo. Pero mi vida me toca a mí... & eso haré.
Aprenderé a no pensar en que te irás... & disfrutarte mientras estés... sea sólo por esta noche... o por mil más. & si te vas... me quedaré con tu recuerdo.
Te amo.
Mary.
No comments:
Post a Comment